En un rascacielos de ciudad resbaladizo, un agente inmobiliario cachondo con una vena traviesa se pone manos a la obra. Atrapado en una transacción caliente, tiene su mente en algo más que solo hipotecas. Tiene un secreto: una cámara oculta que captura toda la acción. Cuando la incauto chica amateur se aleja, aprovecha su oportunidad, abriendo una botella de un burbujeo para aflojar sus inhibiciones. Lo suficientemente pronto, se está poniendo abajo y sucio, cayendo a sus rodillas para una mamada descuidada. La cámara captura cada momento, desde sus tetas firmes rebotando hasta su coño apretado siendo llenado por detrás. Su piel tatuada brilla bajo las luces mientras se inclina, tomándolo profundamente. Esta es una verificación de realidad con un sexy toque - sexo y manos de comercio de dinero, todos atrapados en cámara para su placer visual.