El oficial Zane Walker, un implacable legislador, detiene a la impresionante Kitty Valance por su supuesta mala conducta financiera.Indispuesto a detener a una mujer tan cautivadora, opta por una forma más personal de justicia.En una habitación privada, ordena a Kitty que se arrodille y se desnude, revelando sus pechos naturales.Abrumado por su atractivo, Zane libera su monstruosa polla, a la que Kitty atiende ansiosamente con una mamada profunda.Sus hábiles manos y boca lo vuelven loco, lo que lleva a una apasionada paja y una intensa digitación.El insaciable apetito de placer de Kitty lleva a un encuentro primario salvaje, que culmina en un clímax alucinante.Este intercambio caliente de poder y deseo deja al oficial y sospechoso completamente satisfechos.