La actriz pornográfica pelirroja fan del BDSM Dea Lettas va al calabozo de West Philly y se deja dominar por un profesional experimentado. Adentrándose en el dominio de sus fantasías pervertidas, Dea recibe mucho placer además de complacer a su hombre en sumisión, y al final, obtiene el salvaje final lleno de culo.