La escena es el primer intento de un CD transexual en BDSM: la chica recatada aceptó encontrarse con su sádico Dom para unas medias de red y unos ligueros. Por dios, está deseando una buena nalgada y se alegra de recibir una buena paliza. ¿El clímax? Un viaje con consolador, por supuesto, según sus fantasías.