Mientras juega un videojuego completamente femenino, el personaje de Jilly pierde el juego y posteriormente es castigado por el maestro del juego por no poder proteger a una princesa. Para sorpresa de la princesa, Jilly también la hace desnudarse, ofreciéndole a Jilly una paja con las tetas y una corrida interna seguida de un orgasmo erótico.