Mi hermanastra estaba en mi habitación, y encontró mi vibrador.Ella quería probarlo, y yo estaba más que feliz de dejarla.Le di una cierta orientación sobre cómo usarlo, y ella estaba ansiosa por dejarlo ir.Al principio, estaba dubitativa e insegura, pero con algo de persuasión y aliento, pronto se metió en el surco.El vibrador la estaba haciendo sentir increíble, y ella amaba cada segundo de ello.Pude ver el placer en su cara, y sabía que esto era solo el comienzo.Seguimos jugando juntos, explorando nuevas posiciones y ángulos, hasta que finalmente llegó a su clímax.Fue una experiencia increíble, y supe que esto solo era el comienzo de nuestras aventuras sexuales juntas.