Una interpretación de lo estrictamente disciplinario, un oficial bisexual 'convoca' a dos jóvenes a la servidumbre sexual, participando así en una conducta impropia que ignora la relación empleador-empleado. Los dos hombres, al principio, siguen siendo insondables a su encanto, pero son sus subordinados y se inclinan ante su poder bruto - el resultado es una escena erótica insoportable.